Cinco mil toneladas de tierra contaminada se amontonan junto a las obras del circuito urbano de Fórmula 1, en el barrio del Grao. La empresa CLH, propietaria y responsable de este material, busca una alternativa al traslado a un vertedero controlado, según indicaron fuentes de la compañía.

Eso sí, la misma persona precisó que todo quedará despejado antes de la celebración del Gran Premio de Europa, el próximo 24 de agosto. La montaña de tierra está justo al lado del trazado de velocidad y no interfiere en su construcción, aunque supone una fea imagen.

Los 5.000 metros cúbicos provenienen de las tareas de descontaminación de la vieja planta de hidrocarbursos, entre la calle Poeta Sanmartín y Aguirre y la prolongación del paseo de la Alameda.

Del resto, 165.000 toneladas de tierra removida era limpia y 330.000 toneladas se trataron en el mismo lugar, gracias a una máquina de lavado e inertización que estuvieron en servicio durante meses.

La planta de hidrocarburos acogió desde principios de siglo enormes depósitos de combustible. Fue durante la guerra civil cuando se produjeron los mayores daños, debido a los bombardeos. El derrame de parte del material se filtró al subsuelo, lo que hizo necesaria la descontaminación antes de ser transformado en una zona de desarrollo residencial.

Algo parecido ocurrió aguas arriba, en la avenida de Francia. En esta ocasión fue debido al vertido de residuos químicos de antiguas fábricas en la zona. Los promotores de este nuevo barrio, así como la Conselleria de Territorio en la desembocadura del viejo cauce, se han encargado estos años de retirar y tratar los productos contaminantes.

Sobre el destino de los 5.000 metros cúbicos de tierra, CLH busca ahora "alternativas técnicas" aunque la primera opción es su traslado a un vertedero controlado. La parcela donde se amontona el material es propiedad del Ministerio de Fomento, al pertenecer a la antigua playa de vías de la estación del Grao.

Precisamente la Conselleria de Infraestructuras estudia las 16 ofertas para la urbanización del paddock del circuito urbano, entre la calle Poeta Sanmartín y Aguirre y la propia estación. Se trata de uno de los últimos contratos por adjudicar, al igual que ocurre con la rehabilitación de los tinglados 4 y 5 para los boxes de los equipos.

A pesar de que faltan sólo cinco meses para la celebración del Gran Premuio, todavía no ha acabado la fase de movimiento de tierras y construcción de las canalizaciones de servicios públicos. Al igual que ocurre en la dársena interior, todas estas zanjas discurren por el exterior de la futura calzada, para que cualquier reparación la afecte lo menos posible.

En mayo y junio se entregarán las obras del Grao y el puerto respectivamente. A partir de ese momento, es posible que se celebre una carrera previa para probar el circuito. La empresa concesionaria del evento, Valmor Sport, todavía no ha dicho nada al respecto, salvo manifestar que sería muy interesante para poner a prueba la infraestructura del circuito urbano.